martes, 15 de septiembre de 2009

"La moral" algo que hace falta en estos tiempos.

Para adentrarnos en los problemas de la Ética, partamos de nuestra experiencia. Es un hecho que nos señala nuestra propia experiencia que, en determinadas circunstancias, expresamos valorizaciones morales. Los contenidos de nuestros juicios se refieren a categorías opuestas: de bien o mal.

Así hablamos de actos nobles, heroicos, desinteresados, los que están en la esfera del concepto de "bien". Pero, hablamos de actos infames, egoístas, los que están en la esfera del concepto de "mal".

En el primer caso, hablamos de actos morales positivos; en el segundo, de actos morales negativos. Así, por ejemplo: a un asesino lo tratamos de inmoral; a una persona que sacrifica su vida para salvar a otro la tratamos de héroe, pues este sacrificio es de gran calidad moral . Ello nos pone en evidencia que nuestra valoración tiene un carácter objetivo, es decir, que se rige por el objeto que verificamos. En nuestro caso, el asesinato, y por otro lado, el heroísmo. Dicha objetividad nos permite formar juicios morales de validez universal: "El asesinato es una inmoralidad":

De lo dicho hasta ahora se desprende que la valoración moral propiamente dicha la aplicamos sólo a acciones humanas.

Cada persona puede y tiene que ser moral, y para esto no es necesario tener dinero, no se vende en el supermercado, es algo innato que muchas veces se deja escapar.


1 comentario:

Anónimo dijo...

Eso es totsllmente cierto. Sea bueno O malo todos tenemos una manera de expresar lo que creemos que es nuestro moral. Aunque preferiblemente queremos que la gente tengan buen moral.